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Sábado 05/04/2014. Teatro Echegaray.Aunque ya no era Carnaval, sonaron con fuerza y alegría las chirigotas y los pitos.
Texto: Françoise Chabassier | Fotos: Web Chirigóticas
El pasado sábado ell Echegaray recibió a Las Chirigóticas, Alejandra López Segovia, Ana López Segovia y Teresa Quintero que presentaban su espectáculo La maleta de los nervios.
Las tres Chirigóticas, como por arte de magia, llevaron en su "maleta de los nervios" a su público al sur del sur o sea a Cádiz, mediante un mapa proyectado en una sábana y ¡claro está! lo encantó con este acento tan bonito y gracioso que tienen los gaditanos. El escenario se convirtió en un patio de vecinos en el que se secaban las sábanas que las tres actrices utilizaban para aparecer, desaparecer y cambiarse. Milagri, la desgraciada, Macarena, la apañada y Marisa, la doña perfecta, las tres M de sus nombres pero también la M de mujer, representaban a siete millones de la población española, las amas de casa. Y estas tres maravillosas y simpáticas actrices, contaban y cantaban las penas de estas mujeres cuya única ocupación era cuidar de la casa. Sencillamente hablaban de su vida, con su vocabulario, sus expresiones, cantaban los productos domésticos que compraban, hablaban de sus hijos, de porque se habían casado. Hablaban, hablaban y hablaban de sus desilusiones que pueden llevar a algunas a la depresión. De vez en cuando gritaban su desesperanza porque no podían más con un marido parado, por la falta de dinero, por la ausencia de reconocimiento por su trabajo o porque se daban cuenta de que se habían equivocado. Eran tan auténticas, tan reales como puede serlo tu vecina. Hubiera podido ser trágico pero Las Chirigóticas lo hacían con esta gracia y con este sentido del humor típico de Cádiz que provocaban la hilaridad y los aplausos de los espectadores entusiasmados y estruendosas carcajadas.
Esta comedia muy divertida, alegre y bien llevada, incitaba también a preguntarse ¿Cuáles son las razones para que una mujer decida quedarse en casa?. ¿Por qué la educaron así?, ¿Por qué piensa que es lo mejor para sus hijos?, ¿Por elección propia?, ¿Por qué se ha quedado en paro?, ¿Por qué su marido no quiere que trabaje?
Este “colectivo profesional” de siete millones de amas de casas es el más numeroso del país y al mismo tiempo el más desprestigiado. Estas mujeres dependen completamente del prójimo en este caso del marido y como no tienen recursos económicos para independizarse, si se encuentran en una situación difícil, se ven atrapadas en un círculo vicioso que puede llevarlas a muchos extremos como depresiones, violencia de género y muerte.
Pero las otras mujeres, las que tienen que ir a trabajar fuera porque también tienen sus razones, porque son viudas, divorciadas, el marido gana poco o lo que sea y tienen que mantener a la familia y cuando vuelven del trabajo por la noche ellas también llevan “La maleta de los nervios”. Deben hacer lo mismo que las amas de casas, o sea que las que trabajan fuera tienen doble jornada, estrés, poco tiempo para ver a sus hijos y maridos y casi siempre trabajan por un sueldo de miseria pero que ayuda a la familia. No sé cuál de las dos situaciones es mejor. Bueno, por lo menos no dependen económicamente del marido. Para mucha gente, con los recortes y la reforma laboral, los sueldos se han reducido tanto que actualmente es casi una esclavitud trabajar, por no hablar del abismo salarial entre sexos. Sin embargo, al contrario del ama de casa, la mujer trabajadora tiene derechos laborales pero ¿hasta cuándo?
Fue una hora y media de diversión, el Echegaray estaba lleno de espectadores que no paraban de reírse y de interrumpir las canciones de Las Chirigóticas con frenéticos aplausos. La maleta de los nervios se cerró sobre un público relajado que se fue contento a su casa, lo sé porque como yo me voy la última escucho los comentarios. Otra vez bravo.